Como ya he comentado en otro post del blog, tengo a una estudiante de Filología Clásica de la Universitat de Barcelona a la que le doy clase de griego clásico. Cuando yo estudiaba en la Universidad, recuerdo que, aunque el nivel tampoco fuera para tirar cohetes, al menos nos daban los textos extraídos de ediciones en latín y en griego. Nos informaban de las mejores ediciones tanto para el texto original como para las traducciones. Por lo visto, esto ya ha pasado a la historia. Ahora solo les dan una página web cochambrosa para que se impriman los textos y he tenido que ser YO, no sus profesores de carrera, quien informara a la chica sobre ediciones traducidas de los textos clásicos. Pero el golpe de gracia me lo ha dado al comentarme que empezaron siendo unos 40 y ahora quedan unos 15, que, por otra parte, ya están pensando en cambiar de licenciatura. Desde aquí quiero enviar mi agradecimiento a los responsables de la carrera de Filología Clásica de la émerita Universitat de Barcelona. Si ya es difícil convencer a la gente para que haga esta carrera, ustedes se están encargando de asquear a los pocos que quieren estudiarla. Sigan pagándose mariscadas a su salud.
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